El lanzamiento de un phablet por parte de Apple se ha hecho esperar ya mucho tiempo (llevamos ya más de un año oyendo hablar de él) y parece que aún se hará esperar otro poco más ya que, según las últimas noticias, a los de Cupertino no les será posible finalmente presentarlo al mismo tiempo que el de 4.7 pulgadas. Las buenas noticias, en cualquier caso, que se confirmaría al menos su llegada a las tiendas antes de finales de año. Las noticias que han circulado hasta el momento apuntan a que con el iPhone 6 podríamos encontrarnos con una evolución bastante importante respecto a generaciones anteriores (como sucedió, por ejemplo, con el iPad Air frente a sus predecesores) con novedades sustanciales tanto en lo que respecta al diseño, como a la resolución de su pantalla o a su tamaño. La que podría ser, no obstante, la novedad más llamativa, el lanzamiento de un modelo “phablet”, podría no ver la luz al mismo tiempo que las otras. El modelo “phablet” entraría en producción más tarde Según filtraciones que, como es habitual, provienen del entorno de los fabricantes en Asia, Apple habría pospuesto la entrada en producción del modelo de mayor tamaño del iPhone 6: mientras que el de 4.7 pulgadas lo haría en el mes de julio, el de 5.5 pulgadas (hay ciertas discrepancias sobre el tamaño de este modelo que oscila, dependiendo de la fuente, entre 5.5 pulgadas y las 5.7 pulgadas) no lo haría hasta el mes de septiembre. Esto concuerda, por otra parte, con algunas informaciones previas que señalaban que la compañía de la manzana se estaba encontrando con algunos problemas de suministros para este dispositivo. Sí que llegaría antes de terminar el año La parte positivo de la noticia es que al menos sí que confirmaría que no volvería a retrasarse hasta la próxima generación, ya para 2015, sino que simplemente se presentaría y lanzaría un poco más tarde que el modelo de 4.7 pulgadas. Ambos verían la luz, en cualquier caso, en el último trimestre del año, presumiblemente el primero en septiembre y el otro en torno a noviembre. Lógicamente, esto significaría que nos podemos despedir casi definitivamente de una posible presentación en el WWDC en junio. Sea como sea, que Apple no puede seguir retrasando el lanzamiento de smartphones con pantallas más grandes es algo que parece bastante claro a estas alturas, como también lo es que los de Cupertino son plenamente conscientes de ello, y no sólo por la cantidad de veces que diversos analistas se han pronunciado han hecho público informes con esta conclusión, sino porque sus propios estudios de mercado así lo indican, como prueban los documentos internos que se filtraron recientemente.
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